Etiqueta energética en los neumáticos
La unión europea ha creado una etiqueta para los neumáticos que utilizará como parámetros: las clases de eficiencia energética, la capacidad de agarre en suelo mojado y el nivel de ruido emitido mientras está en funcionamiento.
En el caso de la eficiencia energética, las calificaciones van desde la A a la G, excluyendo la D, que no se utiliza. La diferencia entre cada letra trae consigo una reducción o un aumento en el consumo de combustible de entre el 2,5% y el 4,5%.
El grado de agarre en suelo mojado proporcionará información al usuario sobre la capacidad de dicho neumático para detener un vehículo lo antes posible en carreteras con el pavimento mojado. La diferencia entre cada grado conlleva un aumento o descenso en la distancia de frenado de entre tres y seis metros a una velocidad de 80 kilómetros/hora.
Para controlar la contaminación acústica, los neumáticos mostrarán el nivel de ruido, en decibelios, emitido al entorno por la fricción del neumático. Cuántas más barras negras aparezcan en la etiqueta, mayor ruido producirá el neumático.
Los fabricantes están obligados a ofrecer todos estos datos en su información comercial y añadirlo en forma de pegatina en los neumáticos de las clases C1 (turismos) y C2 (transporte ligero). Además, los distribuidores deben incluirlos en las facturas que emitan a los consumidores.
Internet también jugará un papel fundamental en este tema ya que los distribuidores deberán incluir en sus páginas web calculadoras de ahorro de combustible y emisiones en función del tipo de neumático elegido. Además, la Unión Europea ha puesto en marcha una web específica para informar al consumidor sobre el nuevo etiquetado de neumáticos que será obligatorio en otoño
*Información recogida de motorspain.